“Somos lo que comemos”, una frase de Ludwig Feuerbach, en la que intentaba explicar que la alimentación es la base de desarrollo de cualquier nación. Un población bien alimentada crecerá en estatura, inteligencia, fortaleza contra virus y bacterias, y alcanzará nuevos niveles de desarrollo económico, político y cultural. Si esta frase es perfectamente válida en nuestro cuerpo, lo es también en nuestra alma. Dios ha provisto del alimento perfecto para mantener un alma próspera, sana y santa: Su Palabra. En […]